Esteman cautivó al Auditorio Nacional con una noche llena de grandes éxitos, ritmo, baile, sorpresas e importantes invitados.
Por Josué Olvera.
Este jueves 9 de noviembre, Esteban Mateus Williamson, mejor conocido como Esteman, se presentó por primera vez en el Auditorio Nacional. El cantante reveló que llegar a este gran e importante escenario, es un “sueño hecho realidad”, pues siempre fue su objetivo, cuando llegó a nuestro país y se presentaba en pequeños escenarios.
El colombiano inició su concierto con algunos de sus más grandes éxitos, que de inmediato pararon a todos los asistentes de su lugar, y los pusieron a bailar y cantar a todo pulmón. “Baila”, “Noche sensorial”, “Hasta que tú me quieras”, “Burkina Faso” y “Para siempre”, abrieron la noche.
La primera invitada de la noche fue Juliana, con quien cantó “Adelante”, un tema que originalmente interpreta con Carla Morrison, y que le erizó la piel a todos. Siguió “Amor libre”, tema que enaltece el orgullo de la comunidad LGBT+, y con el que su club de fans llenó el Auditorio de Globos de colores. Por su parte, él ondeó la bandera arcoíris. Le siguió “Juan y Paul”, con la que cerró la primera parte del concierto.
Salió del escenario e hizo un cambio de ropa. El segundo invitado subió al escenario, Caloncho, con quien cantó “Mar”. Le siguieron “Pornostalgia”, y “Caótica Belleza”, canción con la que fue recibido en México en sus inicios. “Este es un himno de celebración. México es mi casa, amo México, las personas, identidades. Es una ciudad diversa, donde estoy casado y enamorado en México. Es la mejor noche de mi vida, después de mi matrimonio”, dijo.
Esteman ofreció una sección acústica
“Esta es la sección acústica, pues muchas canciones nacieron así”, dijo antes de entonar “Si volviera a nacer”, “Extraños” (donde todo el público prendió sus luces del celular, y él grabó el momento) y “Vencimiento” (junto a otros invitados: Silvestre y la Naranja, quienes también abrieron el show).
Sobre la primera rola, reveló que se la dedicaba a su mamá, quien se encontraba en el público. “Le escribí esta canción a mi mamá. Le agradezco por todo lo que ha sido en mi carrera. Ella y mi papá han sido todo para mí desde el principio. Mis papás me han ayudado a dar ellos pasos. Están junto a mis suegros, mi esposo, la familia de mi esposo. Todos ellos son mi raíz”.
Esteman salió del escenario una vez más, regresó ‘volando’. Cantó “Milagrosa” y “Yo te diré”, y después invitó a Jay de la Cueva para entonar “Despertar”. Este dueto es nuevo, y formará parte de su nuevo disco, es una canción en la que hablan de la salud mental. “Mi esposo me ayuda con esos temas. Es un laberinto como el de mi cabeza”, dijo. Al hablar de esto, el público le pidió que subiera su esposo, el actor Jorge Caballero, a quien recibió con un tierno beso.
Posteriormente, recordó sus inicios con un popurrí de “El distractor”, “Aquí estoy yo”, “Como vez primera” y “No te metas a mi facebook”. “Estas canciones son de cuando empecé, gracias por traerme hasta aquí”, dijo.
Aprovechó para convivir con sus fans de cerca
Al cantar “Solo”, Esteman bajó del escenario para cantarle a los fans, y tomarse fotos y videos con ellos. Después puso a bailar a todos con “Esa parte de mí”, canción que hizo con Los Ángeles Azules. Subieron al escenario otros invitados, Bandalos chinos y Epilogio, para interpretar “Mistica”.
Volvió a cantarle a su esposo, la canción con la que le pidió matrimonio, “Un día en París”, que conmovió hasta las lágrimas a todos los enamorados. Al final de esta sección, deleitó con un cover, muy a su estilo de “Vuela, vuela”, canción de Magneto.
Salió unos minutos del escenario y reapareció desde atrás del Auditorio, caminó entre las butacas junto a la invitada más esperada por los fans, Daniella Spalla, con quien cantó dos canciones: “Besos y pendientes” y “Te alejas más de mí”. La última canción fue “Mr. Trance”.
De nueva cuenta salió del escenario, y regresó para dar fin al concierto con “Reina leona”, éxito que se ha viralizado en todos lados, y “Fuimos amor”, uno de sus temas más exitosos. El concierto duró cerca de 3 horas, donde la energía no bajó ni un momento, y los fans se deleitaron de principio a fin.
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