Revive una noche épica con Duki en el Palacio de los Deportes, donde el argentino demostró por qué es uno de los grandes del trap.
¡El Palacio de los Deportes se convirtió en el templo del trap este pasado sábado con la presentación estelar de Duki en su tour A.D.A! Desde el primer minuto, el ambiente estaba cargado de una electricidad que solo presagia una noche legendaria. Los fans, impacientes, no paraban de saltar y gritar “¡Duki, Duki, Duki!” mucho antes de que las luces se apagaran para dar inicio al espectáculo.
Cuando las luces finalmente se apagaron y Duki apareció en escena, el Palacio literalmente explotó. La gente en las gradas no se sentó ni un segundo y en la zona general, el frenesí fue tal que nadie pudo mantenerse quieto. Duki arrancó con “Givenchy”, seguido de “Rockstar”, y así, uno tras otro, fue desgranando los 25 temazos de su repertorio, incluyendo hits como “Malbec”, “Goteo” y la explosiva “Duki Bzrp Session:50”.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando el artista detuvo el concierto para asegurarse de la seguridad de sus fans en las primeras filas, demostrando que más allá de la música, el respeto y cuidado entre todos es lo más importante. Esta actitud fortaleció aún más el vínculo con sus seguidores, quienes acataron de inmediato, cuidándose entre sí.
El argentino conquistó a sus fanáticos mexicanos con una actuación épica llena de energía y conexión
Duki, en medio del show, compartió con todos lo nervioso que se sentía por querer dar lo mejor de sí. Su equipo le aconsejó simplemente disfrutar del momento, consejo que Duki tomó al pie de la letra, transformando su nerviosismo inicial en una actuación sublime que todos pudimos sentir. Y vaya que se notó, porque cada canción fue acompañada de una ovación ensordecedora.
La producción del show no se quedó atrás, apoyando a Duki con visuales impactantes, una pirotecnia en frío que añadía dramatismo a los beats y una banda que estaba completamente sincronizada con la energía del cantante.
El regreso de Duki a la CDMX después de su reciente aparición en el Flow Fest demostró que sus fans realmente lo adoran, añorando su presencia como si hubieran pasado años desde su última visita. La energía que Duki y su público compartieron esa noche fue algo de otro mundo, evidenciando que el rapero no solo ha regresado, sino que está aquí para quedarse como uno de los grandes en la escena.
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