

Redistribución de distritos en Colorado: una oportunidad legal y política en 2025
En 2018, los votantes de Colorado aprobaron una comisión independiente para la redistribución de distritos, buscando frenar el partidismo que antes dominaba este proceso cuando estaba en manos de la Legislatura estatal. Sin embargo, el panorama político nacional ha cambiado drásticamente.
El ascenso de un partidismo extremo impulsado por el trumpismo ha llevado a que algunos estados, como Texas, impulsen mapas electorales diseñados para favorecer a los republicanos en el Congreso. Ante esto, crece la presión en estados controlados por demócratas, como Colorado, para responder con la misma estrategia.

El fallo de 2003 y la enmienda de 2018
Durante años se asumió que redistribuir distritos a mitad de década en Colorado era imposible, debido a un fallo de la Corte Suprema estatal en 2003. En ese momento, el tribunal invalidó un mapa republicano alegando que la constitución estatal solo permitía la redistribución después del censo.
Sin embargo, este argumento podría no ser tan sólido hoy. La enmienda constitucional de 2018, que creó la comisión independiente, modificó la disposición utilizada como base en el fallo de 2003. Esto abre la puerta a interpretar que la prohibición no es absoluta y que existe margen legal para una nueva redistribución.El fallo de 2003 y la enmienda de 2018
Durante años se asumió que redistribuir distritos a mitad de década en Colorado era imposible, debido a un fallo de la Corte Suprema estatal en 2003. En ese momento, el tribunal invalidó un mapa republicano alegando que la constitución estatal solo permitía la redistribución después del censo.
Sin embargo, este argumento podría no ser tan sólido hoy. La enmienda constitucional de 2018, que creó la comisión independiente, modificó la disposición utilizada como base en el fallo de 2003. Esto abre la puerta a interpretar que la prohibición no es absoluta y que existe margen legal para una nueva redistribución.

El debate político y las opciones
Aunque muchos demócratas en Colorado valoran la independencia de la comisión, otros temen que no responder al gerrymandering republicano en otros estados pueda significar perder el control de la Cámara de Representantes de EE. UU.
Entre las opciones planteadas están:
- Que la Legislatura estatal apruebe una nueva redistribución y afronte las demandas judiciales.
- Presentar nuevos mapas directamente a los votantes en elecciones extraordinarias.
- Impulsar una enmienda constitucional que elimine la comisión independiente antes de 2028.
Incluso figuras como Kent Thiry, uno de los principales defensores de la comisión, admiten que entienden por qué algunos demócratas quieren actuar: “Me opongo al cáncer del gerrymandering, pero respeto a quienes no quieren llevar un cuchillo a un tiroteo”, señaló.
Un desafío existencial para la democracia
Actualmente, Colorado tiene cuatro representantes republicanos y cuatro demócratas en el Congreso, a pesar de que el estado es gobernado íntegramente por demócratas y cuenta con amplias mayorías legislativas.
Para líderes como la excongresista Yadira Caraveo, permitir que los republicanos manipulen distritos en otros estados sin respuesta es “poner en riesgo la democracia misma”.
En palabras del gobernador de California, Gavin Newsom —quien impulsa una estrategia similar en su estado—: “Tenemos que combatir el fuego con fuego”.
El debate está sobre la mesa, y las decisiones que se tomen en Colorado en los próximos meses podrían marcar no solo el mapa electoral, sino el rumbo político del país.