

Después de tres años viviendo en Adelaide Cottage, la princesa Kate y el príncipe William han decidido mudarse junto con sus tres hijos, el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis, a una nueva residencia en Windsor. Según reportes del diario británico The Sun y confirmado por un portavoz del Palacio de Kensington a la revista PEOPLE, Kate Middleton y el príncipe William se mudan a Forest Lodge, una propiedad con ocho habitaciones que promete convertirse en el nuevo hogar de la familia Wales.
La mudanza se realizará a finales de este año, consolidando un nuevo capítulo en la vida de los príncipes de Gales y sus hijos, quienes ya se habían establecido en la tranquila localidad de Windsor desde 2022.

Un nuevo hogar en Windsor
Forest Lodge, anteriormente conocido como Holly Grove, se encuentra dentro del majestuoso Windsor Great Park, en Berkshire. La propiedad cuenta con amplios espacios, jardines privados y una estructura histórica que combina tradición con comodidad moderna. Con sus ocho habitaciones, la mansión ofrece mayor privacidad y comodidad para la familia, que ha mantenido un perfil discreto pese a su posición pública.
La decisión de mudarse también responde a la búsqueda de un hogar familiar a largo plazo, pues aunque Adelaide Cottage ofrecía un ambiente más íntimo, no contaba con el espacio suficiente para la dinámica de la familia Wales.
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La vida de la familia Wales entre varias residencias
Esta no será la primera mudanza de los príncipes de Gales. Antes de instalarse en Adelaide Cottage en 2022, ya contaban con Anmer Hall, una casa de campo en Norfolk que utilizan para escapadas familiares, y el Palacio de Kensington en Londres, que sigue siendo su base oficial para compromisos institucionales.
Sin embargo, Forest Lodge representa un equilibrio entre privacidad, amplitud y cercanía con Windsor, donde los hijos del matrimonio continúan sus estudios y actividades.
De esta forma, Kate Middleton y el príncipe William refuerzan su decisión de priorizar la vida familiar, manteniendo un entorno estable para sus hijos mientras cumplen con sus deberes reales. La mudanza simboliza una nueva etapa que marca tanto la vida personal como pública de los futuros reyes de Inglaterra.